Con gran tristeza tenemos que comunicar el fallecimiento, ayer por la tarde, de nuestra compañera Dulce Cordón. A pesar de la gravedad de su enfermedad, nadie esperaba este desenlace repentino. Su dulzura y su bondad, la fuerza que emanaba de ella tras su fragilidad solo aparente, dejan una profunda huella en los corazones de todos los que la conocimos. La vamos a echar mucho de menos.